“Mi llegada a la carpintería fue por caminos extraños. Después de estudiar filosofía en la Universidad De Chile, dediqué mi tiempo a escribir y traducir poesía. El año 2011 decidí pasar menos tiempo sentado entre mis libros y comencé de a poco a sumergirme en la carpintería. Lo que en un principio fue solo una forma de ganar un poco de dinero extra, se transformó rápidamente en una obsesión. Creo que el amor por la madera es un sentimiento extremadamente contagioso y una pasión que merece ser compartida. Sean todos muy bienvenidos a mi casa, espero que encuentren aquí un lugar para crecer como carpinteros. Salut!”